Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres. Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. (Mateo 5:13-16)
Desde sus inicios el cristianismo comenzó siendo una religión que se distinguía por ser diferente a todas las demás religiones y por promover valores que contrarrestaban contra la inmoralidad prevaleciente en los tiempos. Nuestro señor Jesús nos mandó a ser luz en el mundo (Mateo 5:14). La luz es algo que se distingue porque usted se fija en ella, sirve para guiar, sirve para dar dirección, sirve para localizarse. Jesus también nos mandó a ser la sal de la Tierra (Mateo 5:13). La sal es un mineral necesario para el funcionamiento del cuerpo humano. No solo resalta el sabor de las comidas sino que también ayuda a mantener procesos del cuerpo sin sal un ser humano puede enfermarse y hasta morir.
En tiempos antiguos cuando no existía la tecnología de radares ni GPS los navegantes se dejaban llevar por los faros de luz en las costas cuando navegaban por las noches. Los faros les ayudaban a saber dónde estaba el límite de la costa. Esto era información vital para saber por dónde navegar de noche y evitar encallar o hundirse. Si un faro de luz se apagaba significaba la ruina o la muerte de decenas de marineros.
La sal es un mineral tan valioso que en un momento se usaba como parte del pago de los soldados Romanos. De ahí es que viene la palabra salario. La porción de sal que recibía cada soldado romano era parte de su sueldo. En los tiempos en los que no existían refrigeradores la sal era necesaria para poder conservar los alimentos y las carnes por tiempo prolongado. La sal además ayuda a mantener el balance de el metabolismo en el cuerpo. La sal es en algo vital, necesario para la vida.
Qué es lo que pasa cuando se deja de alumbrar? Accidente y muertes. Qué es lo que pasa cuando la sal pierde su esencia? Pérdidas y muertes. qué es lo que ocurre cuando una iglesia deja de alumbrar y de ser la sal de la tierra? Muerte espiritual. Cómo empieza a apagarse la luz de una iglesia y a perder su sazón? Cuando comienzan a hacer cosas distintas a la esencia del evangelio. La luz cuando pierde brillantez comienza a difundirse en la oscuridad hasta apagarse. La sal cuando pierde su potencia comienza a ser menos efectiva hasta ponerse sosa.
La Biblia nos habla de un rey conocido como Acaz:
De veinte años era Acaz cuando comenzó a reinar, y dieciséis años reinó en Jerusalén; mas no hizo lo recto ante los ojos de Jehová, como David su padre. (2 Crónicas 28:1)
Lo primero que notamos de Acaz es su juventud. A los 20 años todavía una persona no ha madurado lo suficiente como para tener a su cargo algo tan grande como un reino. La inmadurez es algo que comienza a irse después de los 25 años. Todos nosotros hemos cometido errores de juventud. La etapa de la juventud es una etapa de aprendizaje y es en la que más errores se cometen. El caso de Acaz nos da una ilustración de esto.
Según nos narra la Biblia Acaz cometió todos los pecados que Dios prohibía:
Antes anduvo en los caminos de los reyes de Israel, y además hizo imágenes fundidas a los baales. Quemó también incienso en el valle de los hijos de Hinom, e hizo pasar a sus hijos por fuego, conforme a las abominaciones de las naciones que Jehová había arrojado de la presencia de los hijos de Israel. Asimismo sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, en los collados, y debajo de todo árbol frondoso. (2 Crónicas 28:2-4)
Algo que hay que notar de lo que hizo Acaz es que "anduvo en los caminos de los reyes de Israel" y también "actuó conforme a las abominaciones de las naciones que Jehová había arrojado". Ambas acciones denotan un alejamiento de la esencia de lo que se supone que fuera el pueblo de Dios. Israel fue una nación unida hasta después que murió Salomón. Luego de su muerte Israel se dividió en diez tribus al norte y en Judá. En Judá estaba el templo de Dios por lo tanto se esperaba que los que estuviesen más cercanos al templo de Dios fueran más fieles a la ley de Dios. Si fuéramos a ver figurativamente la división de aquellos tiempos podríamos decir que Judá representaba la iglesia con sana doctrina; Israel representaba a las iglesias liberales; y las naciones representarían al mundo.
La historia de la iglesia cristiana se ha caracterizado siempre por una división entre visiones. Por un lado están los conservadores que se apegan al texto bíblico. Algunos de forma literal o literalista. Los conservadores buscan que el culto sea algo solemne y ritual. Por otro lado están los cristianos liberales que entienden que la Biblia es un libro dinámico y experimentan con nuevas formas de culto y adoración. Para los liberales el culto es una actividad más.
En Puerto Rico hay un refrán que dice que "el que empieza a resbalar no para hasta que se escocota". Cuando una persona que está acostumbrada a hacer las cosas de cierta manera empieza a desviarse entra en un proceso de disolución. La luz de una bombilla está rodeada de un cristal para proteger el filamento del aire. Si se quita ese cristal el filamento arderá más fuertemente y se extinguirá. Cuando la sal se deja destapada y expuesta al aire comienza a disolverse y a perder sazón. Cuando una iglesia comienza a tratar de hacer las cosas como las hacen otras iglesias o como lo hace el mundo su luz empieza a desvanecerse y su sal empieza a disolverse.
La disolución de las doctrinas fundamentales comienza sutilmente. Primero se hace de forma experimental luego se convierte en parte de la liturgia. A veces cuando se quiere experimentar con nuevas formas de culto se empiezan haciendo pequeñas desviaciones. Hoy día hay Iglesias que tienen grupos de baile que comenzaron en un momento con algo que se conocía como poesías coreadas. Hoy día hay altares que parecen escenarios de teatro o de discotecas y todo comenzó con la idea de hacer más llamativo el evangelio con dramas.
Dios siempre mandó a su pueblo a mantenerse separado de las naciones, a no imitarlas (Jeremías 10:2). A los cristianos se nos ordena no hacer amistad con el mundo (Santiago 4:4). Se nos ordena a mantener una santidad, que es una separación (Hebreos 12:14). Las personas que estaban encargadas de los faros los protegían por medio de unos vidrios que rodeaban la luz. De esa manera se evitaba que la luz se expusiera los elementos y se apagara. Se buscaba evitar que lo de afuera dañara lo de adentro. Cuando la sal se envasa se pone en recipientes que la aíslen del aire para que no se exponga y no se disuelva. Con esto se busca evitar que lo de afuera dañe lo de adentro.
La iglesia tiene que cuidarse más y evitar que lo de afuera dañe lo de adentro. Porque permitir la disolución del evangelio tiene consecuencias:
Por lo cual Jehová su Dios lo entregó en manos del rey de los sirios, los cuales lo derrotaron, y le tomaron gran número de prisioneros que llevaron a Damasco. Fue también entregado en manos del rey de Israel, el cual lo batió con gran mortandad.
(2 Crónicas 28:5)
A Acaz lo entregaron en manos de los Sirios. Hoy día la iglesia está a Merced del mundo. Tenemos pastores CON MIEDO a decir lo que dice la Biblia porque no quieren ser censurados. Acaz fue derrotado. La iglesia hoy día ya no es tan estridente como antes. El ruido del mundo se metió en la iglesia y la disolvió y ya no se distingue, ha sido derrotada, la luz se está apagando. A Acaz le tomaron prisioneros. La iglesia está perdiendo gente en especial jóvenes que están siendo presa del diablo y presos del mundo.
¿Habrá remedio para este mal?
Las pocas iglesias que se han mantenido fieles al fundamento bíblico tienen asegurada su victoria. Pero son muy pocas y ya Cristo lo había dicho que la puerta iba a ser estrecha y pocos iban a ser los que se iban a salvar (Mateo 22:14). Examínese y mire usted si está en la mayoría de las iglesias que le son simpáticas al mundo pero le dan asco a Dios por su tibieza (Apocalipsis 3:15,16). Si usted está en una iglesia que está en las mismas de Acaz tenga cuidado y busque una iglesia que no esté imitando al mundo. Si usted es un pastor y está como Acaz tiene tiempo de rectificar porque Cristo aún no ha llegado pero está bien cerca así que APÚRESE y arregle las cosas con Dios.
Cuídese que lo de afuera no dañe lo de adentro.
Dios te bendiga.